No Sembréis Entre Espinas
A semejanza de toda planta o árbol que da fruto o da semilla y que sirve como alimento, el hombre que se allega a DIOS debe dar un fruto excelente. Tanto los profetas como los apóstoles y nuestro Señor Jesucristo, nos enseñan con alegorías, simples pero profundas como alcanzar esta bendición.