Programa para Instructores

La Fraternidad Infantil Cristiana ha incorporado a hermanos adultos y jóvenes a la labor tan importante en la iglesia como es la atención de los niños y niñas. Hay diversos hermanos de la iglesia, apoyando en esta labor, ya que la enseñanza de la sana doctrina a los niños de la iglesia; es un ministerio, el cual debe ser llevado con gran celo, responsabilidad y santidad por quienes lo ejercen.

Los hermanos instructores de la fraternidad, prestan su apoyo a mediano y largo plazo, lo cual ha sido útil, para elevar la calidad de la enseñanza y orientarla hacia un carácter formativo. Este proyecto, además de beneficiar a los niños, coadyuvará a propiciar el crecimiento espiritual de los participantes como instructores, pues les permitirá conocer mejor y afianzar su fe en la doctrina de la iglesia de Dios. Y en un futuro, sobre todo a los jóvenes, les será de gran apoyo para presidir alguna fraternidad o incluso iniciar una carrera ministerial.

Propiciar el crecimiento espiritual de aquellos hermanos que tienen un don y lo quieren poner al servicio de Dios, enseñando la sana doctrina a los niños de la iglesia. Proporcionándoles a ellos el espacio, para qué mediante la instrucción de niños, conozcan mejor la doctrina de la iglesia de Dios y confirmen su fe. Los requisitos mínimos para ser instructores de niños, son los siguientes:

1. Miembros bautizados, en caso de no serlo, que manifiesten expresamente el propósito de bautizarse en fecha próxima. Hec. 8: 36.
2. Tengan aptitudes para enseñar. 2ª. Tim. 2: 2.
3. Temerosos de Dios y de buen testimonio en la iglesia. Exo. 18: 21.
4. Asistan regularmente y guarden el sábado con su familia. Lev. 26:2.
5. Que practiquen el diezmo, las ofrendas y limosnas. 2ª Cor. 9:7.
6. Conozcan y tengan cuidado de la doctrina. 1ª. Tim. 3: 16.

Firma de una Carta compromiso

Los instructores deberán de firmar una carta compromiso con el Pastor y Ministerio Local de la iglesia. Mediante dicha carta, asumirán el compromiso por escrito de trabajar en la Fraternidad Infantil Cristiana (FIC) sujetándose a la doctrina, disciplina y los reglamentos de la iglesia, expresando también su voluntad de trabajar con gran solicitud y responsabilidad, así como apoyar en todos los aspectos el trabajo de los niños.

• Instructores de Escuela Sabática. Los hermanos y hermanas se iniciarán en el “Ministerio de la Enseñanza”, como instructores de Escuela Sabática. Este tiempo les servirá para completar y confirmar sus conocimientos doctrinales, desarrollar sus dones y aptitudes en la enseñanza, mejorar la comunicación con los niños; conocer, identificarse y sentirse comprometidos con los objetivos y metas del Programa.
  
  
• Inducción al Trabajo. Se deberá involucrar gradualmente a los nuevos instructores, en todos los aspectos de trabajo del FIC, a fin de que conozcan las líneas generales, los objetivos y metas establecidas en el mediano plazo, así como las acciones que conforman el programa anual con los objetivos y metas de cada año.

Sobre este marco de referencia, deberán asignarse funciones y responsabilidades a cada uno de ellos, a fin de que contribuyan:

a) La conformación de los programas trimestrales.

b) El desarrollo de las guías para los temas de instrucción.

c) Ideando las actividades para reforzar los temas que se imparten.

d) Creando y estableciendo los controles de asistencia, trabajo y evaluación de los niños durante cada trimestre, así como los de estímulos y reconocimientos a los niños de mayor aprovechamiento.

Responsables del Proyecto

El Proyecto comprende una gama de actividades que se desarrollarán durante todo el año. Abarca la organización de diferentes secciones:

I. Escuela Sabática.

II. Mensaje Matutino.

III. Mensaje Vespertino.

IV. Actividades en el horario de Fraternidades en general.

V. Preparación para asistencia a las Reuniones regionales.

Existe muchos hermanos jóvenes y adultos, que tienen, o están llevando, una preparación universitaria. Algunos de ellos conocen la doctrina de la iglesia de Dios y tienen un don recibido del altísimo, están dispuestos a ponerlo a su servicio como instructores de niños. Otros sin estudios, conocen la doctrina y tienen el deseo de trabajar a favor de los niños de la iglesia, a fin de que la ministración del don que han recibido sea eficaz. La sagrada escritura nos enseña, que estos dones deben ser usados o administrados conforme a la medida de la fe:

De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe, o si de servicio, en servir o el que enseña, en la enseñanza. Romanos 12: 6 y 7

El uso de estos dones al servicio de Dios, constituye un ministerio: “El Ministerio de la Enseñanza”. El ministerio de la enseñanza dentro de la Iglesia de Dios, debe realizarse reconociendo que la instrucción a los niños es un deber de los padres y de la iglesia:

Instruye al niño en su carrera y aun cuando fuere viejo no se apartara de ella. Proverbios 22:6

Respetando, entre otros, los siguientes principios que establece la palabra de Dios para este ministerio:

• Enseñar con verdad el camino de Dios. Mar. 12: 14.
• Lo que conviene a la sana doctrina. Tito 2:1.
• Instruir con fundamento en la Palabra de Dios. 2 Tim. 3:16.
• No con palabras de humana sabiduría, sino espiritualmente. 1ª. Cor. 2: 13.
• Reprendiendo y exhortando con toda paciencia y doctrina. 2 Tim. 4: 2.
• Hablando y enseñando rectamente. Luc. 20: 21.

El éxito del proyecto depende de la oración constante a Dios de todos, la colaboración recíproca del ministerio local, instructores, y colaboradores. El trabajo no termina al finalizar el trimestre o el año; sino hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del hijo de Dios.

Evaluación del Proyecto

Cada una de las acciones o actividades del proyecto serán evaluadas anualmente, comparándolas con los objetivos y los resultados esperados, establecidos en el Programa Anual de Trabajo.

La evaluación hará en el informe anual del Proyecto General, dirigido al ministerio local; de ser necesario, se modificarán las metas del Proyecto conforme a las recomendaciones hechas por el Pastor de la iglesia, y las indicadas por el resto del ministerio local, que se deriven de la revisión de dicho informe.

La Enseñanza de Niños, un Ministerio

• El niño en el contexto del propósito de Dios para el hombre.
• El niño heredero de las promesas de Dios.
• El niño parte de la familia cristiana.
• Un miembro importante de la iglesia de Dios.
• Los deberes recíprocos de Padres e hijos según la sagrada escritura.
• La educación cristiana de los niños. Su instrucción en la sana doctrina.
• Principios y valores bíblicos en los que se deben formar los niños.
• El ministerio de la enseñanza.
• Los mejores valores y principios del instructor para cumplir eficazmente su ministerio.