Mi relación con Dios
Se entiende por relación como la conexión o unión entre algo o alguien. Es importante que esta relación sea bilateral, esto quiere decir que se consideran ambas partes; por ello para poder tener una buena relación es necesario conocernos para poder ofrecer lo mejor de nosotros a la otra parte. Recordemos que nosotros somos creación de Dios y Dios nos ama de tal manera que “…dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda más tenga vida eterna” (Juan 3:16) y nosotros ¿qué ofrecemos a Dios?
La relación del hombre con Dios antes y después de Cristo
Para iniciar consideremos las siguientes citas:
“Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios”. Romanos 3:23.
“Porque la paga del pecado es muerte, más la dadiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”. Romanos 6:23.
“Jesús les dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. Juan.14:6.
De Romanos 5:8-21 podemos rescatar:
- Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
- Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más estando reconciliados, seremos salvos por su vida.
- El pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte.
- Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida. Vida eterna, mediante Jesucristo.
Entonces podemos resumir:
Antes de Cristo | Después de Cristo |
Destituidos de la gloria de Dios. En estado de pecado. En estado muerte. Era enemigos. Estábamos en condenación. | Reconciliados con Dios. Fuimos justificados. La oportunidad de la salvación. La oportunidad de obtener la vida eterna. Podemos llegar al Padre por medió de Jesús. |
El elemento importante para que podamos tener esta relación con Dios es nuestro Señor Jesucristo; ya que sin su sacrificio no podría existir dicha relación.
Elementos de una relación
Los elementos que debe existir en cualquier relación son:
- Conocimiento. Dios nos conoce porque Él nos formó, pero nosotros ¿Cómo podemos conocerlo?, lo podemos conocer leyendo su palabra.
- Comunicación. Nos podemos comunicar con nuestro Dios a través de la oración.
- Amor. Dios mostró su amor dando a su hijo por nosotros y una forma de mostrar nuestro amor hacia Él es guardando sus mandamientos.
- Compromiso. Existe diferentes formas en que nos podemos comprometer con Dios puede ser a través de votos y uno de ellos es el bautismo.
- Fidelidad. Dios es fiel “Conoce pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos…” (Deuteronomio 7:9) y nosotros la podemos demostrar no apartándonos de su camino.
- Confianza. Nuestra fe siempre debe de estar en nuestro Dios.
- Respeto. Dios nos ofrece la oportunidad de cambiar nuestra vida por una mejor, pero Él también respeta nuestras decisiones. Nosotros podemos demostrar nuestro respeto obedeciéndole.
¿Qué significa tener una relación con Dios?
Para dar respuesta a esta pregunta reflexionemos en los siguientes versículos:
“Más Dios muestra su amor para con nosotros, en que, siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”. Romanos 5:8.
“Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada”. Santiago. 1:5.
“Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”. Romanos 6:23.
“No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé”. Juan 15:16.
“Porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de la corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios”. Romanos 8:21.
Por lo tanto, el tener una relación con Dios significa:
- Reconocer el amor que tiene por nosotros.
- La oportunidad de alcanzar la vida eterna.
- Obtener libertad.
- Podemos implorar a Dios por nuestras necesidades.
- Dios da abundantemente.
- Fuimos elegidos por Dios y nosotros podemos aceptar su elección.
- Llevar fruto.
Dios te ama y tiene un plan para tu vida
¿Cuál es ese plan? Como mencione anteriormente la relación es bilateral, en este momento vamos a conocer el plan que tiene Dios para con nosotros.
- Que todos los que en él crean tengan vida eterna.
- Tener vida y en abundancia.
- Fuimos hechos para buenas obras.
- Mando a su hijo para salvar a su pueblo de sus pecados.
- Tiene su pensamiento hacia nosotros de paz y no de mal.
- Estar en su amor.
Y esto lo podemos confirmar en las siguientes citas:
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no sr pierda, más tenga vida eterna”. Juan.3:16.
“Y dará a luz a un hijo, y llamarás su nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados”. Mateo 1:21.
“.. yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia”. Juan 10:10.
“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal…”. Jeremías 29:11.
“Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras…”. Efesios 2:10.
“Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor… Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido”. Juan 15:10-11.
Formas de fortalecer tu relación con Dios
Ahora veremos la parte que nos corresponde a nosotros para fortalecer esa relación con Dios, algunas formas son:
- Poner a Jehová delante de nosotros. Esto quiere decir que todo lo que vayamos a realizar lo pongamos en las manos de Dios.
- Acercarnos a Dios. ¿Cómo nos podemos acercar a Dios?; Primero conocerlo a través de su palabra, haciendo buenas obras y a través de la oración.
- La oración.
- Leer la palabra de Dios.
- Meditar sobre vuestro camino. Analizar cómo estamos delante de Él y si en algo estamos fallando tenemos que trabajar para mejorarlo.
- Adorarle.
- Practicar la palabra de Dios. Lo que leemos llevarlo a acciones.
Conclusión
Para finalizar recordemos que en una relación se debe considerar ambas partes. Dios siempre está presente en nuestra vida y se manifiesta de muchas maneras. Ahora ¿qué le ofrecemos nosotros? Trabajemos en nuestro diario vivir para ofrecerle nuestra mejor versión como hijos de Dios.