El Fuego que Viene
El calor siempre ha existido, de hecho es una parte fundamental de la vida en nuestro planeta, sin la luz y el calor del sol, no existirían plantas o árboles que diesen fruto, nuestro cuerpo sufriría de grandes carencias, la temperatura idónea para el hábitat del ser humano es entre los 16° y 24°c, aunque el hombre siempre ha sufrido por este calor, cuando es excesivo.
“Y aconteció que al salir el sol, Dios dispuso un sofocante viento oriental, y el sol hirió la cabeza de Jonás, de modo que se desmayaba y anhelaba morirse. Y dijo: ¡Mejor sería mi muerte que mi vida!”.
Jonás 4:8
¿Qué tan fuerte sería el calor que emanaba del sol, para que Jonás el profeta sintiera desmayarse? Seguramente por encima de los 40°c, tanto que deseaba la muerte.
Las recientes muertes por calor en Estados Unidos y Canadá (más de 1000), han encendido una alerta para algunos, la ola de calor hace que la temperatura llegue a 45° a 47°c, con una sensación térmica de hasta 52°c, con consecuencias vistas en estos países, el estado ha establecido, los llamados centro de enfriamiento, donde las personas pueden reducir su calor corporal, algo que no tiene precedentes, Rusia, Nigeria, Pakistán, México, son algunos de entre una lista de 40 países en el mundo que están sufriendo este llamado cambio climático, pero como siempre sucede con las personas, como con los países, es cuando los ricos sufren que algo llama la atención, dado que muchas muertes ha habido por este factor en naciones pobres.
Las consecuencias no solo son las muertes de personas, también, sequías, desecaciones de lagos y lagunas, decremento en el nivel de ríos, presas, reservas de agua, incendios, muerte de animales, perdida de oficios y empleos, es cada vez más recurrente y algo que el mundo no prevé, una hambruna severa. En Siberia, Rusia, un lugar que siempre ha tenido temperaturas bajo cero, este año registro una temporada con temperaturas promedio de 35°c.
Uno de los muchos ejemplos que encontramos en nuestro país, es la desaparición del lago Cuitzeo, fuente de trabajo para los pescadores hoy es un desierto donde las tolvaneras son cosa común. Pero quizá uno de los peligros inmediatos y a futuro sea la escasez del líquido vital para la humanidad, cada año se hace patente los problemas por este valioso líquido. Una consecuencia extra, será la escasez de alimentos debido a las sequias continuas, trayendo hambre y revueltas sociales.
El hombre achaca al cambio climático, calentamiento global todas estas situaciones, si bien es cierto que el hombre ha contribuido a destruir su hábitat. Pero ¿la biblia coincide con esta aseveración?…veamos lo que el apóstol Pedro escribe:
“Amados, ésta es la segunda carta que os escribo. En estas dos cartas estimulo con exhortación vuestro limpio entendimiento, para que recordéis las palabras que antes han sido dichas por los santos profetas, y el mandamiento del Señor y Salvador declarado por vuestros apóstoles. Primeramente, sabed que en los últimos días vendrán burladores con sus burlas, quienes procederán según sus bajas pasiones, y dirán: “¿Dónde está la promesa de su venida? Porque desde el día en que nuestros padres durmieron todas las cosas siguen igual, así como desde el principio de la creación.” Pues bien, por su propia voluntad pasan por alto esto: que por la palabra de Dios existían desde tiempos antiguos los cielos, y la tierra que surgió del agua y fue asentada en medio del agua. Por esto el mundo de entonces fue destruido, inundado en agua”.
2 Pedro 3:1-6
Nuestra mente puede llegar a contaminarse o ensuciarse con pensamientos que provienen de la ciencia o de doctrinas extrañas como las esotéricas, paranormales, o científicas, cuantas veces los conocedores de las cosas de DIOS no han creído a la teoría de la evolución, o el origen de la tierra por seres más avanzados de otros mundos, o la teoría del big bang, y así sucesivamente.
El limpio entendimiento es un entendimiento que proviene del espíritu, dicho por Pablo, es un entendimiento espiritual, este nos permite visualizar la vida, el universo, los acontecimientos que suceden de una forma diferente a quienes ven en el universo y sus eventos de una forma inmutable, sin cambios y sin que los elementos sean herramientas de advertencia y castigo del Señor.
Quienes se expresan “siempre ha llovido”, “siempre ha temblado la tierra”, “siempre ha habido enfermedades” “o siempre ha habido ondas de calor” su entendimiento es carnal, así tal cual escribió el apóstol Pablo la carne no entiende las cosas espirituales. Debemos entender que las palabras y pensamientos de los burladores, solo son excusas sobre su forma de vivir, en una fijación hacia las cosas materiales, la molicie y los placeres mundanos de todo tipo, como ellos afirman, no hay pruebas de que DIOS haya actuado jamás en la historia; ¿por qué creeremos que vaya a hacerlo en el futuro?
Para muchos todas las cosas como las 10 plagas en Egipto, los eventos climáticos, el calentamiento global, ¡tienen una explicación!, y tienen la osadía de formar hipótesis, y explicar los eventos. Más se equivocan, Pedro en una comparación con el castigo que sufrió el mundo con el diluvio, hace referencia a la forma en que DIOS, con su poder, por su palabra y acción del verbo, separo la tierra del agua y la sustento sobre la misma y dispuso entre ella agua por debajo (fuentes) y sobre ella (nubes), trayendo castigo por la maldad y el pecado.
Aquellos hombres del mundo antediluviano no creyeron a Noé, el castigo que vez tras vez y año tras año pregonó, ¿Quién creerá ahora que viene fuego del cielo? ¿ÉL que creo la tierra, no creo también el sol? E hizo fenecer al mundo antiguo por el agua, de la misma forma los hombres que tienen este pensamiento ignoran que el próximo castigo será por fuego.
De la misma forma en que el mundo se encuentra asentado en fuego, prueba de ello los miles de volcanes, que hoy día muchos se encuentran activos, de forma continua y algunos extrema. El versículo 10 y 12 de esta misma carta, mismo capítulo, nos enseñan en una forma clara que los cielos se encenderán como una cortina cuando es consumida por el fuego.
“Pero por la misma palabra, los cielos y la tierra que ahora existen están reservados para el fuego, guardados hasta el día del juicio y de la destrucción de los hombres impíos. Aguardando y apresurándoos para la venida del día de Dios! Por causa de ese día los cielos, siendo encendidos, serán deshechos; y los elementos, al ser abrasados, serán fundidos”.
2 Pedro 3:7,12
Israel nunca creyó al profeta Jeremías; como poder creer que los grandes y portentos de muros de Jerusalén, y su gran templo hechos de colosales piedras de gran tamaño podrían ser destruidos por fuego. Hablando de las personas que conocían bien de las leyes de DIOS y sus designios (en apariencia) Jesús les recrimina:
“Cuando sopla el viento del sur, decís: “Hará calor.” Y lo hace. ¡Hipócritas! Sabéis interpretar el aspecto del cielo y de la tierra, ¿y cómo no sabéis interpretar este tiempo?”.
Lucas 12:55-56
Como ya vimos se necesita de esa inteligencia espiritual para poder discernir los tiempos de DIOS y sus propósitos. En consonancia a lo que dice Pedro el profeta Isaías escribe por inspiración del espíritu santo.
“La luz de la luna será como la luz del sol, y la luz del sol será siete veces mayor, como la luz de siete días, en el día en que Jehovah ponga vendas a la fractura de su pueblo y cure las contusiones que él le ha causado”.
Isaías 30:26
Aunque muchos han alegorizado este verso es indudable que habrá un castigo por fuego, pero aun antes de la destrucción, vendrá una tribulación mediante el calor extremo, que a este momento sabemos el sol tendrá un rol muy determinante en el castigo que precede a la destrucción. Hoy conocemos que la luz del sol es intensa de acuerdo a las explosiones nucleares en su interior, esta transformación de energía es la que se convierte en luz. No es la intención explicar la biblia científicamente, pero vemos que el sol tendrá una intensa actividad en los últimos tiempos y por consecuencia el calor aumentará sobre toda la tierra, con sus consecuencias.
Cabe resaltar que se ha interpretado este versículo de la biblia, que el sol calentaría 7 veces más, siendo esto erróneo, ya que aunque la luminosidad del sol aumenta porque aumenta el plasma solar, por las fusiones nucleares, no son proporcionales, influyen otros factores como el helio e hidrogeno existentes en el astro rey. El “statum máximum” (situación extrema) sobrevendrá a este mundo cuando DIOS determine dejar caer las copas de la ira o castigo, mencionadas por Juan el teólogo.
“El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, y le fue dado quemar a los hombres con fuego. Los hombres fueron quemados con el intenso calor y blasfemaron el nombre del Dios que tiene autoridad sobre estas plagas, pero no se arrepintieron para darle gloria”.
Apocalipsis 16:8-9
Que dolores tan terribles son aquellos que se sufren cuando hay quemaduras en nuestra piel, el testimonio de una persona de Nigeria, azotada por una ola de calor y en donde no existen los recursos de países de primer mundo, como las salas de enfriamiento, alimento y bebidas refrescantes gratuitas, era: “no podemos salir a trabajar, de hecho no podemos levantarnos del piso un poco fresco, porque sentimos quemarnos cuando estamos fuera de nuestras casas”.
Ni siquiera alcanzamos a imaginar el terrible castigo que representa esta copa, cuando le sea dada potestad a este cuerpo celeste de derramar sus rayos, sin mesura. La soberbia humana no tiene comparación, no reconocer que DIOS tiene la total y plena injerencia en este mundo y que el determina a las fuerzas naturales, unas veces por misericordia y otras por castigo para mostrar su poder es de fatuos.
“La tierra será del todo devastada y enteramente saqueada, porque Jehovah ha pronunciado esta palabra. La tierra ha sido profanada por sus habitantes, porque han transgredido las leyes, han falseado el derecho y han quebrantado el pacto eterno.”
Isaías 24:3,5
Lo que acontece al hombre, lo podrá explicar con argumentos científicos, o sociales, mas DIOS nos dice exactamente cuál es, la verdadera razón, de igual manera que en el tiempo antediluviano, la incredulidad fue grande a la misma talla que la soberbia y la suficiencia. La impiedad, el pecado, la maldad, y la indolencia existente en esta generación traerán el juicio de fuego.
¿Y qué pasará con los que creen en Dios?
La respuesta no es tan sencilla, como parece, no todos los que creen que hay un DIOS y un salvador como Jesucristo, tendrán oportunidad a salvarse de las cosas que han de venir.
Tendrán que cumplirse algunos requisitos a cabalidad, existe un antecedente en Babilonia o mejor dicho en el libro de Daniel, cuando Azarías, Misael y Ananías se negaron a adorar una imagen que no correspondía a su fe, prefirieron morir a desobedecer al mandamiento de la ley. Lo maravilloso es que fueron salvados por intercesión divina en un horno que se calcula podría haber llegado hasta los 1800° c, aunque si el grado de fusión del oro es de 1000°c y sirvió para fundir el oro, con el que se realizó la estatua, hay quienes dicen que podría haber llegado hasta los 7000°c, algo inimaginable.
Lo cierto es que la fe, las acciones justas de los santos y la misericordia de DIOS, serán esenciales, para nuestra salvación.
“No tendrán hambre ni sed; ni el calor ni el sol los golpeará. Porque el que tiene misericordia de ellos los guiará y los conducirá a manantiales de aguas”.
Isaías 49:10
Al profeta le son reveladas misericordias que son para confianza y seguridad en el obrar de acuerdo a los mandamientos y preceptos de DIOS.
A manera alegórica de un edificio Pablo nos explica, que de la manera como un ser humano construye una casa y según sus anhelos o necesidades crece la construcción primaria ya sea de los materiales más simples o los más resistentes, y después le añade acabados de acuerdo a su solvencia o deseo, otra vez desde los más sencillos hasta los más ostentosos.
De esa misma manera, pero en lo espiritual nuestro edificio que es nuestro cuerpo será probado por el fuego, purificador, verificador si cumplimos cabalmente con la dignidad de ser salvados de esas cosas tan terribles por venir.
“Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, como perito arquitecto he puesto el fundamento, y otro está edificando encima. Pero cada uno mire cómo edifica encima, porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. Si alguien edifica sobre este fundamento con oro, plata, piedras preciosas, madera, heno u hojarasca, la obra de cada uno será evidente, pues el día la dejará manifiesta. Porque por el fuego será revelada; y a la obra de cada uno, sea la que sea, el fuego la probará”.
1 Corintios 3:10-13
Sin duda la palabra de DIOS se cumplirá y el castigo a los impíos y a este mundo será por un fuego terrible. Queda luego que sigamos el consejo del apóstol Pedro:
“Por tanto, oh amados, estando a la espera de estas cosas, procurad con empeño ser hallados en paz por él, sin mancha e irreprensibles”.
2 Pedro 3:14