Una persona integra es aquella que siempre hace lo correcto, haciendo todo aquello que se considera bueno si afectar los intereses de otros.

La gratitud hacia Dios es algo bueno e importante ya que nosotros debemos de estar siempre agradecidos con Él por todo lo que nos ha dado.

La solidaridad es una de las manifestaciones del amor que lleva a un hijo de Dios a tener empatía e identificarse con el prójimo. Se trata de que nos unamos unos a otros, no solo para estar juntos sino para beneficio de unos a otros, siempre hay alguien a quien puedes serle útil, nunca desaproveches la oportunidad de ayudar a alguien.

Con absoluta fe en Dios, Noé construyó el arca para salvar a su familia y al mundo. Esta fue la obra más justa ante los ojos de Dios, y gracias a ella fue llamado heredero de la justicia.

Hay dos equipos, uno es de Dios y el otro es el mundo, gobernado por el diablo. ¿De qué equipo quieres ser?

La tolerancia se refiere a la capacidad de aceptar las ideas, preferencias, formas de pensamiento o comportamientos de las demás personas.

El aprendizaje esperado es dar a entender qué es el respeto y cómo respetar a nuestro prójimo y a Dios, y cómo lo podemos aplicar en nuestra vida.

La tenacidad es la fuerza que impulsa a continuar con empeño y sin desistir en algo que se quiere, teniendo esto en cuenta siendo hijos de Dios, también lo tenemos que llevar en práctica. De hecho, tenemos múltiples ejemplos en la Biblia sobre ello y que nos dejan mucha enseñanza.

La Fraternidad de Adolescentes esta formada por niños y niñas de la edad de 13 a 15 años; quienes dejan a tras la Fraternidad Infantil. Esta es una etapa, en la cual los adolescentes se van preparando para después integrarse a la Fraternidad de jóvenes.