El español, como todos los idiomas, es uno que tiene sus puntos a favor y en contra, a pesar de ser uno de los más hablados en el mundo y el que cuesta más trabajo aprender debido a la variedad y flexibilidad del mismo en cuanto se refiere a formulación de palabras y sonidos, lo cual se inclina y se presta a cometer algunos errores en la escrituración y pronunciación de las palabras, para lo cual existe una parte en el estudio de dicho idioma llamada: Gramática, de la cual se extiende una ramificación de nombre: Ortografía, la cual estudia las reglas y los signos de complemento en la escritura, si lo complementamos con ejercicios de redacción, el resultado será favorable.